Una oferta pública inicial (OPI) de acciones se trata del proceso de ofrecer acciones de una corporación privada al público por primera vez. La emisión pública de acciones permite a una empresa obtener capital de inversores públicos.
La idea de las ofertas públicas iniciales (OPI) es atractiva e irresistible para muchos inversores. Las empresas que cotizan en bolsa suelen pertenecer a sectores de gran interés para los inversores en ese momento. Las empresas de OPI también tienden a vender productos que se han convertido en nombres familiares para los inversores en un corto período de tiempo. Estas empresas recurren a las OPI como una forma de recaudar efectivo para sostener su rápido crecimiento.

Pero a pesar de su atractivo, las OPI son muy especulativas debido a que:
Falta un historial de negociación de acciones: es imposible ver cómo se han comportado las acciones a lo largo de los años porque una oferta pública inicial aún no se está negociando.
Suelen ser empresas jóvenes: las empresas más pequeñas y de rápido crecimiento suelen ser las que cotizan en bolsa. Estas empresas tienden a tener un historial operativo limitado, equipos de gestión inmaduros y solo unos pocos productos o clientes.
Venden sus acciones primero a grandes inversores institucionales: las OPI generalmente se venden primero a grandes inversores, como planes de pensiones, al precio de oferta. Cuando la acción comienza a cotizar, los inversores pueden ofertar esas acciones por encima o por debajo del precio de oferta. Las OPI muy esperadas a menudo atraen tanto interés del público en general que las acciones se ven impulsadas a niveles excesivamente altos. Los inversores que compran en el apogeo de la manía a menudo se sienten decepcionados con sus ganancias.
Ejemplos de OPIs
Alibaba, el gigante chino de comercio electrónico, debutó en la Bolsa en 2014 superando todas las expectativas, y en su primer día de cotización en la Bolsa de Nueva York, las acciones de la empresa subieron 38%. Desde su debut a diciembre de 2019, el precio de sus acciones ha ganado más de 200%.
Uber quizá uno de los debuts más sonados, esperados y decepcionantes. La empresa se convirtió en la cuarta salida a Bolsa más grande en Wall Street en la década, pero el día de su OPI, luego de salir a 45 dólares por acción, el precio cayó 8% y desde entonces no ha dejado de bajar. En los meses que lleva cotizando, el valor de las acciones ha caído más de 37%, pues los inversionistas dudan de su rentabilidad, ya que la firma sigue sin generar ganancias.